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Cuando era niña, era un poquito ruidosa.
También me emocionaba con casi todas las cosas que yo vi. jaja
Jugaba con mi perro, Tar, un labrador negro todos los días.
Me gustaba más jugar afuera y me columpiar con mi abuelo.
Tenía que poner la mesa cada noche. No me permitían comer todas las galletas en el armario.
Yo llevaba faldas grandes y bailaba mucho en nuestro salón.
También yo tomía clases de ballet. Aún tengo mis zapatillas de ballet.
Jugaba con mi perro, Tar, un labrador negro todos los días.
Me gustaba más jugar afuera y me columpiar con mi abuelo.
Tenía que poner la mesa cada noche. No me permitían comer todas las galletas en el armario.
Yo llevaba faldas grandes y bailaba mucho en nuestro salón.
También yo tomía clases de ballet. Aún tengo mis zapatillas de ballet.
1 comment:
Sí, los perros son estupendos. Mmm, los quehaceres no son divertido. ¡Pero los galletas son tan buenas!:) Que chido, mis hermanitas tomían los clases de ballet tambíen. Buen trabajo.
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